“La democracia no es el silencio, es la claridad con que se exponen los problemas y la existencia de medios para resolverlos”… Enrique Múgica Herzog (1932 –¿?) Escritor español.
El gobernador michoacano, Silvano Aureoles Conejo, se arrepintió de ser claro y contundente con el Magisterio Democrático.
Ante la pregunta si ya existía acercamiento con la nueva dirigencia de la CNTE, el Ejecutivo estatal fue más allá y señaló: “he puesto en la mesa un tema que me parece fundamental, que el sindicato retome o se ubique en la legalidad. El gobierno no puede firmar minutas ni convenios con una organización sindical que no tiene, que no está legalmente reconocida, que no tiene la titularidad del gremio”.
Lamentablemente cuando debió confirmar su declaración ante el nuevo cuestionamiento respecto a si ya no negociaría con el Magisterio Democrático, Silvano Aureoles fue precavido y respondió: “queremos una negociación dentro de la legalidad, con transparencia, con claridad y en apego a las reglas”.
Ante una nueva observación de los compañeros periodistas de que la CNTE no tiene laudo, el Gobernador se limitó a señalar que “lo que tienen que hacer es resolver su tema interno, pero claro, tienen nuestro reconocimiento la Sección 18 del sindicato” y cerró el tema con “todos ellos son Sección 18, el SNTE y la CNTE”.
De inició pareció que Aureoles Conejo pretendía aprovechar el evidente quebranto que atraviesan los Democráticos tras su reciente renovación, donde las acusaciones entre diversos personajes y aspirantes a la dirigencia, terminó en serias acusaciones que pueden debilitar a dicha ala sindical.
Sin embargo, el gobernador se arrepintió en el transcurso de la misma entrevista y con respuestas ambiguas trató de dejar abierta la puerta para no romper en definitiva con los profesores democráticos.
En el ámbito de lo legal, el asunto es simple, ninguna de las administraciones estales debieron negociar con la CNTE por el simple hecho de no tener el reconocimiento oficial. Pero, la fuerza que han mostrado y el control que mantienen en la Secretaría de Educación y en general, en todo el sector educativo, han obligado a que los gobiernos de Víctor Manuel Tinoco Rubí, Lázaro Cárdenas Batel, Leonel Godoy Rangel y el de Fausto Vallejo Figueroa con todo y sus interinatos y sustituto, no tuvieran más opción que negociar minutas de cientos y/o miles de millones de pesos y en total opacidad.
El asunto ha resultado tan lamentable, que en la firma de dichas minutas se han presentado contradicciones desafortunadas. Sólo por citar un ejemplo, en junio del 2013, el entonces secretario de Educación, Jesús Sierra Arias, me declaró en entrevista en Noticiero Michoacano que no habían firmado ninguna minuta, al día siguiente, el entonces gobernador interino, Jesús Reyna García, declaró que la
minuta ya se había firmado y aunque la administración estatal no quiso transparentarla, finalmente el Magisterio Democrático me la hizo llegar y puso en evidencia al entonces titular del ámbito educativo.
Dicha minuta, por más ambigüedades que contenía en su diferentes peticiones donde tampoco se establecían montos de inversión, se calculó que costó entre los 800 y los mil 100 millones de pesos.
Así que ante semejante anecdotario, Silvano Aureoles tiene razón y debe mantenerse firme para negociar únicamente con la Sección 18 del magisterio estatal, que tenga la toma de nota, y hacer pública de inmediato, toda minuta y acuerdo que se alcance. De no hacerlo, el avance será mínimo y seguirá lejos de recuperar la rectoría en el sector educativo.
Vale considerar que para enfrentar semejante conflicto, Aureoles Conejo necesita del apoyo de la Federación, así que ojalá se lo mantengan. No se puede soslayar que en términos pragmáticos, como suele ser la política, dicho respaldo se lo pueden retirar cuando así convenga a los intereses del Poder Federal en turno y si esto sucede, si Silvano Aureoles deja de ser una pieza importante en el pragmatismo electoral del PRI gobierno, entonces serán otros 6 años semejantes a los 3 lustros anteriores.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias. cmongem@hotmail.com