Por Andrés Resillas
Luego de deliberar por más de seis horas los tres jueces del Tribunal de Enjuiciamiento, finalmente emitieron una sentencia de culpabilidad y le impusieron 40 años de cárcel a Francisco Ignacio Ortiz Manzano por el delito de feminicidio en agravio de su esposa Gabriela Pérez.
Los hechos ocurrieron el nueve de julio del 2019 en un negocio de comida sobre la Avenida Camelinas.
Francisco Ignacio es un hombre joven, en plenitud de vida, por lo que cuando salga de la cárcel ya será un adulto mayor.
Los jueces tomaron en cuenta todo el pasado de violencia doméstica que vivieron Gabriela y su hija de ocho años de edad; familiares y amigos relataron que de manera constante Gabriela presentaba lesiones producidas en sus conflictos maritales con Francisco Ignacio.
Cuando el Fiscal del caso relató todos los detalles y anécdotas violentas, el imputado Francisco Ignacio endurecía su rostro y miraba fijamente a los jueces.
También se consignó en el juicio que el ahora culpable, estuvo trabajando en una carnicería, por lo que se deduce su proclividad al uso de las armas blancas o cuchillos.
También los impartidores de justicia dieron credibilidad a la versión de que a dos meses de que Gabriela decidió dejar a su esposo y denunciarlo por violencia ante la Fiscalía del Estado, Francisco Ignacio Ortiz no pudo contener la ira que le provocaba que su ex pareja tuviera alguna relación con otro hombre.
Gabriela fue asesinada y su cuerpo presentó más de 50 heridas y laceraciones producidas por su atacante.
Ahora el hogar que formaban Francisco Ignacio, Gabriel y su pequeña hija quedó destrozado, producto de la violencia intrafamiliar.