“Los buenos gobiernos se conocen cuando lo que hacen vale más que lo que sus opositores dicen”… Antonio Maura (1853 – 1925). Estadista español.
El presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez Alcázar, intenta privatizar el servicio de alumbrado público de la capital michoacana, para que las más de 68 mil 700 luminarias funcionen y lo hagan con calidad; lo cual abonaría también para que la seguridad mejore, como ha sucedido en ciudades como Chihuahua, Puebla, Mérida o Zapopan, donde ya privatizaron el servicio.
Actualmente una tercera parte de las luminarias no funcionan, por lo que el 80 por ciento de las llamadas que recibe la alcaldía capitalina corresponden a quejas porque más de 23 mil lámparas públicas no sirven y cuando el ciudadano recibe una respuesta favorable para repararla, deben esperar unos 45 días hábiles, como lo señaló el propio Martínez Alcázar.
Cabe destacar que el proyecto ya pasó por el Cabildo y fue aprobado de manera unánime, sin embargo, para llevarlo a cabo, deberá contar con el aval del Congreso estatal, toda vez que el Ayuntamiento de Morelia requiere de un crédito por 42 millones de pesos, más IVA, más gastos de apertura del mismo.
Es decir, se trata de un “crédito contingente”, que ampara 3 mensualidades y que se usará en caso de que la administración municipal no tenga el dinero para realizar el pago mensual de 14 millones de pesos. Según la solicitud y los anexos que ya envió al Congreso del estado el alcalde capitalino y que este miércoles se turnarán a comisiones, los gastos actuales en cuanto a pago de energía eléctrica, mantenimiento, compra de materiales y arrendamientos, entre otros, hacen una suma mensual de 14 millones de pesos, pero, eso no alcanza para prestar un servicio de calidad y con el 100 por ciento de funcionamiento de todas las luminarias.
Por ello Alfonso Martínez y el Cabildo capitalino, han tomado la determinación de poner en marcha el Proyecto Integral de Modernización, Rehabilitación, Mantenimiento, Operación y Gestión del Sistema de Alumbrado Público de Morelia. Que en caso de ser aprobado por la Septuagésima Tercera Legislatura, deberá licitarse para que alguna empresa quiera invertir entre 400 y 600 millones de pesos, para iluminar, en menos de un año y de manera homogénea, con calidad, sistema ahorrador y menos contaminante, toda la ciudad.
De entrada suena atractivo, con los mismos 14 millones de pesos que hoy se destinan a un alumbrado público deficiente y contaminante se tendría un servicio, privado, pero responsable de que Morelia esté debidamente iluminada. Imagino que para las empresas que ya operan en otras ciudades del país, sí es negocio, toda vez que en el caso de Morelia tendrían un ingreso mensual seguro de 14 millones de pesos, es decir 168 millones anuales y 1 mil 680 millones en 10 años, que es el plazo máximo que se comprometería en la licitación. Insisto, suena bien para todos.
Para el ayuntamiento que se quita un problema de encima, para los ciudadanos que tendrían un mejor servicio y para la empresa que tras invertir, podrá recuperase y obtener utilidades. Ahora lo realmente importante es que los diputados tomen una decisión pensando en los morelianos y en caso de ser positiva, que le pongan los candados suficientes a la licitación para que obliguen a la empresa ganadora, a prestar un servicio de calidad y con total transparencia.
Y claro, que no vaya a pesar la animadversión que ha tomado la clase política partidista contra los que hoy se hacen llamar independientes. Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.