En la práctica política que se observa en México por los distintos actores, sean partidos políticos, líderes sociales, académicos, etc. cada vez resultan más claras las posturas que adoptan en favor o en contra de los intereses nacionales y populares, y por lo tanto a favor o en contra de los derechos sociales de la mayoría de la población.
En la izquierda estaban los opositores del antiguo régimen, y a la derecha, sus defensores. En el momento actual, que tenemos un gobierno que se propone gobernar para favorecer “primero a los pobres”, los opositores ahora se identifican como la derecha.
Si bien el gobierno que encabeza André Manuel López Obrador nunca ha dicho que es de izquierda, sus acciones políticas de llevar a cabo transformaciones profundas a favor de todos los mexicanos: acabar con la corrupción, obligar a que paguen impuestos los potentados, rescatar a la Comisión Federal de Electricidad y a PEMEX, mediante la rehabilitación de las Refinerías existentes para aumentar su productividad; la construcción de una nueva y la compra de otra, tareas todas, que llevan como propósito inmediato el logro de la Autosuficiencia energética para dejar de importar gasolinas y otros combustibles, etc. Todas estas acciones políticas se inscriben en los rasgos de un Gobierno Progresista y Popular, que toma partido a favor de los mexicanos más desfavorecidos.
Y aunque estas decisiones del Presidente no son socialistas, sí han afectado los intereses de grandes potentados, y la respuesta de éstos ha sido, y sigue siendo extremadamente violenta en sus ataques frontales al Gobierno, en especial al Presidente; en este afán, se han orquestado la inmensa mayoría de los medios de comunicación, en donde sus opinólogos, editorialistas, locutores y demás voceros, bombardean a cada instante, día tras día con mensajes llenos de rabia tratando de influir en la conciencia de millones de ciudadanos.
Toda esa respuesta de los poderosos, se inscribe como una acción de la derecha en México, que si no fuera por las redes sociales, ya hubieran logrado levantar al pueblo en contra de su gobierno, Tal como lo hicieron en Chile en 1973, logrando que las grandes masas de pueblo, que había votado y elegido al Presidente Salvador Allende, de pronto salieran en copiosas manifestaciones en su contra culpándolo de ser el causante de la escases de alimentos básicos que no se podían adquirir porque los grandes comerciantes que acaparaban estos productos, los escondían y culpaban al Gobierno de Allende de ser el responsable “por comunista”, así lo decían y así lo repetían en todo momentos los medios de comunicación, y así manipulaban y engañaba al pueblo, hasta que finalmente lograron que el ejército diera un golpe de Estado, y derrocara al presidente Allende y sumiendo el pueblo en una ola de represión y sangre encabezada por la Dictadura criminal de Augusto Pinochet.
En su afán por detener los avances y logros del actual gobierno, la derecha se ha unificado políticamente en una alianza de partidos políticos, entre los que se encuentran el PRI, el PAN, y lo que queda del PRD, que hasta la fecha no han logrado minar el apoyo con cuenta el presidente de México. Pretendieron ganar la mayoría en la Cámara de Diputados en las elecciones intermedias del año pasado y no lo lograron. En su desesperación e impotencia decidieron no apoyar la Reforma Eléctrica, quedando en evidencia ante los ojos de la mayoría de los mexicanos que los consideran TRAIDORES A LA PATRIA.
Otro intento más de la derecha por el logro de sus objetivos políticos, es el que intenta el Partido Acción Nacional cuando anuncia la creación de una fundación denominada Patria Unida, aliada a otra organización de España denominada VOX, formación de extrema derecha cuya intención es la desestabilizar a gobiernos democráticos y apoyar el surgimiento de dictaduras. Se ha destacado esta organización en la defensa de empresas como IBERDROLA en España para seguir exprimiendo el bolsillo de los ciudadanos españoles imponiendo los precios más altos en las tarifas del consumo de energía eléctrica como empresa monopolista en la generación de este fluido. Entre otras acciones de esa organización derechista, está su lucha por revocar el derecho al aborto y exigir la derogación de la actual legislación que regula la interrupción voluntaria del embarazo en España; así mismo aplauden que en los Estados Unidos la corte haya derogado este derecho que tenían las mujeres desde hace 50 años
Fundadora y presidenta de Patria Unida, Alicia Galván López fue asesora de la senadora del Partido Acción Nacional (PAN) Alejandra Reynoso y en ese carácter viajó a varios países de Europa a finales del año pasado, con el propósito de participar en un curso de adoctrinamiento impartido por Vox en España y por integrantes de otros partidos de corte fascista en Francia, Polonia y Hungría.
Patria Unida, que surge, según expuso en un comunicado, con la convicción de unir a la población contra la izquierda extrema, que en las últimas décadas ha impuesto ideas de odio que están destruyendo nuestra civilización.
Con este discurso rescatan y hacen suyos los postulados y la ideología de otra organización derechista denominada “SINARQUISMO» que sostenía que debería reconocerse como el padre de la Patria a Hernán Cortés y no a Miguel Hidalgo, puesto que este Cura lo que hizo, de acuerdo a su interpretación, fue interrumpir y destruir el bendito orden y la civilización que nos trajeron los conquistadores, llevando al país a una Anarquía y destrucción de esa “CIVILIZACIÓN” que en santa paz se venía disfrutando en México.
Resalta que cuenta con respaldo importante de líderes internacionales que comparten los valores de la derecha hispanoamericana.
El propósito real de su fundación es formar líderes que confronten la ideología de Morena y es parte también de una estrategia para evitar que vuelva a ganar la Presidencia en 2024, porque dice, “no podemos permitir que ningún gobierno ni partido aliado a las dictaduras de Venezuela, Cuba y Nicaragua quiera imponer su ideología y dividirnos. Con este gobierno, nuestras libertades están en peligro. Y este es un trabajo que nos compromete ahora y más allá de 2024.