- En entrevista televisiva el gobernador con licencia explica la situación de la delincuencia cuando llegó al cargo
- Dice que los michoacanos siguen esperando el apoyo de la Federación
- Revela que en su momento denunció la explotación de la minería michoacana a manos de la delincuencia organizada y de un grupo de chinos
Búsqueda/Redacción
Primera parte
¿Cómo ve la situación económica de la entidad y en especial del gobierno, licenciado Fausto Vallejo?
“Yo estimo que se requieren por lo menos unos cinco mil millones de pesos para que se puedan salir de los problemas económicos que tiene el gobierno. Yo confío en el presidente Enrique Peña Nieto y en que se cumpla con los 250 compromisos dentro del Plan Michoacán y los 12 compromisos que durante la campaña realizó el presidente.
“Vamos a darle tiempo que para se aterricen estas acciones. Yo esperaba que desde el año pasado se concretizaran. En dónde si ha existido un apoyo importante es en materia de desarrollo social, pues de 200 comedores comunitarios que había en el estado ahora son 600. Creo que en ese renglón se ha tenido éxito.
“Y ya existe más cobertura en cuanto techo y piso de cemento, las canastas básicas y todo ese tipo de programas sociales. Eso es lo sobresaliente.
¿Cuál es el saldo del trabajo realizado por el comisionado Alfredo Castillo?
Yo creo que es la ciudadanía la que debe dar una respuesta al respecto. Si sirvió o no sirvió. Yo creo que hubo logros, por supuesto. Pero por ejemplo no se han resuelto los problemas de seguridad. Se avanzó en el combate al crimen organizado, pero también es un hecho que se disparó la delincuencia común. Y en Morelia hemos resentido mucho ese problema.
Pero la ciudadanía es la que debe de calificar ese trabajo y lo calificará en las próximas elecciones. Si creen que hizo buen trabajo el comisionado. Si creen que el Gobierno Federal sí ayudó a Michoacán pues se reflejará en las urnas.
¿Usted confió en el comisionado Alfredo Castillo?
Yo confié en el presidente Enrique Peña Nieto.
Mira, cuando venía el presidente Felipe Calderón, le reclamaba mucho al ex gobernador Leonel Godoy Rangel de por qué se tenía una policía tan corrupta, porque existían tantas cocinas o laboratorios de drogas, por qué tantas armas en Michoacán.
Cuando yo llego a la gubernatura, le pido al presidente Felipe Calderón que me auxilie y a través de Poaré y García Luna, me mandan a un comisario de la Policía Federal, que fue Elías Álvarez, desde ahí siempre estuvimos en coordinación con la Federación.
Porque en lo cortito me decían que no confiaban en el gobernador Leonel Godoy, que había problemas incluso hasta personales.
Pero cuando venía el presidente Calderón me volvía a insistir lo de las policías, las cocinas y las armas. Le dije que nos ayudara. Y mandó una serie de recursos para empezar a sanear las corporaciones. Pero en el caso de las armas, yo dije que el asunto era de competencia federal y que también las armas pasaban por las aduanas, entonces la Federación tenía que intervenir en esos problemas.
Claro que tanto las autoridades estatales como federales son corresponsables. Pero el asunto es cómo llegan esas armas hasta Michoacán. Lo mismo pasa con las cocinas, pues por dónde llegan los precursores químicos, quién los deja pasar. Llegan por las aduanas y por ahí las dejaban pasar.
Y yo agregaría un tercer elemento, junto con el general Bernal que estaba en la Región Militar, era el asunto de la minería.
Nosotros no teníamos dinero ni siquiera para pagar las quincenas. No teníamos dinero ni siquiera para las movilizaciones de las policías, en donde la dotación de cartuchos era de 20 por año. No teníamos dinero. Pero la delincuencia está sacando de mil a mil quinientos camiones diarios de mineral y la delincuencia estaba cobrando un dólar o dos dólares por tonelada, es decir, una cantidad impresionante de recursos. ¿Con qué dinero los combatíamos?
Yo, junto con el general Bernal, fuimos los primeros en poner en la bitácora el problema de la minería; la extracción irracional de nuestros recursos naturales, que nos iban a dejar sin nada y que se realizaba por un grupo de chinos, incluso creo que hasta ilegales.
Un cuarto elemento. Yo le dije al presidente Enrique Peña Nieto: háganos justicia social. Nuestros jóvenes antes se iban al norte hasta por moda, incluso hasta para amarrarse una gringa. Pero ahora ya no se van, se quedaban aquí, y para ellos no teníamos empleo, no había generación de empleo. Ha, bueno, pero a un “Halcón” (vigilante al servicio de la delincuencia), le pagaban hasta 200 pesos diarios.
Otro dato. El 60 por ciento de los muertos o de los detenidos, son jóvenes de 18 a 28 años de edad.
Entonces de qué servía que nos vinieran a decir que los jóvenes y los niños son el futuro de este país, cuando era nuestra principal sangría. Fue entonces cuando le pedimos que nos hiciera justicia social.
Fue entonces cuando el presidente Peña Nieto junto con Miguel Ángel Osorio Chong, comenzaron a hacer un Plan para Michoacán. Primero dicen, van 38 mil millones de pesos y luego van 40 mil millones de pesos, bueno pues los estamos esperando!!
Ahí también van las cosas vitales, como hospitales, las industrias, las carreteras, las presas. Y están comprometidas dos presas: una es la de Chihuero, en Huetamo y la otra es la de Maquilí, en la zona sur del estado.