Por Andrés Resillas/Segunda parte
La madre de Rosario, joven asesinada el cuatro de noviembre del 2019, en calidad de testigo encaró a la imputada Ana Cristina A. en la audiencia oral donde el Tribunal de Enjuiciamiento está recibiendo toda la información sobre los hechos ocurridos.
“Ella sabía todo, desde el principio me dijo el lugar donde encontraron el cuerpo de mi hija; decía que tenía muchas influencias en la Fiscalía del Estado como en el Ejército.
“Incluso cuando estaba desaparecida Rosario, ella me ofreció cuatro millones de pesos para pagar su rescate.
“Yo sabía de la relación que existía entre mi hija y Ana Cristina; por eso la tarde en que desapareció Rosario le hice 11 llamadas telefónicas para preguntarle si estaba con ella, pero no me contestó hasta después de las once de la noche.
“Dijo que había viajado fuera de Santiago Undameo y que no me contestó porque iba manejando su vehículo.
“Una vez que encontraron el cuerpo de mi hija, la Fiscalía me llamó para reconocerla, pero nunca me dieron detalles de cómo la habían asesinado.
“Ana Cristina sí sabía los detalles. Ella comenzó a enviarme mensajes y me informó que fue en el lugar llamado Paso del Muerto, del municipio de Acuitzio en el que la encontraron; que había muerto de dos balazos: uno en el pecho y otro en la cabeza.
“También me indicó que le dispararon con una pistola calibre 45 e incluso me mandó una foto de ese tipo de arma.
“Que mi hija murió aproximadamente a las dos de la madrugada y que no sufrió”.
“Cómo era posible que supiera toda la información de lo ocurrido, cuando a nosotros los familiares de Rosario la Fiscalía no nos proporcionaba ningún dato”, relató la madre alzando la voz.
La testigo resistió todo el interrogatorio de la Fiscalía, pero cuando narró que días después de la muerte de su hija visitó el lugar del hallazgo y recolectó varias piedras manchadas con la sangre de Rosario, comenzó a exaltarse.
“Aquí están las piedras con la sangre de mi hija”, afirmó la mujer sacando un pañuelo y mostrándoselas a los tres jueces.
“Mi hija no tenía enemigos. Siempre fue una buena persona.
“¿Por qué ella tenía toda la información? ¿Por qué sabía los detalles de lo que había ocurrido?
Fue entonces que la madre de Rosario volteó llorando hacia donde estaba la imputada Ana Cristina y estirando el brazo la señaló diciendo:
“¡Ella es la responsable!”.
Por su parte, la Defensa de Ana Cristina no quiso hacerle más preguntas a la madre de Rosario.