POR SOLEDAD ROMERO
En Michoacán existen más de 20 casos de desaparición forzada de las comunidades originarias, por defender sus recursos naturales, proteger su territorio comunal, por motivos políticos o por enfrentarse al crimen organizado y hasta la fecha, ninguna autoridad ha resuelto las demandas de justicia por estas desapariciones. Ayer como hoy, continúa la impunidad, denunció el Consejo Supremo Indígena.
Ello en el marco del 46 aniversario de la desaparición forzada de cinco miembros de la familia Guzmán, de la comunidad de Tarejero, municipio de Zacapu.
“Cinco integrantes de la familia Guzmán Cruz, José Jesús Guzmán Jiménez y sus hijos Amafer, Armando, Solón Adenauer y Venustiano Guzmán Cruz, luchadores sociales originarios de la comunidad p´urhépecha de Tarejero, Municipio de Zacapu, fueron detenidos y desaparecidos por la Dirección Federal de Seguridad (DFS) y el Ejército Mexicano, detenidos por buscar transformar las condiciones de desigualdad, explotación y pobreza en que vivían y desaparecidos”.
“Ninguna institución de justicia o derechos humanos, han logrado traer memoria, verdad o justicia para estos delitos de lesa humanidad.
“Sin embargo, pese al olvido oficial, hoy en día las comunidades y los familiares de los desaparecidos, continuamos exigiendo memoria, verdad y justicia, seguimos incansablemente buscando a nuestros desaparecidos.”